Hola mi nombre es Dan... y era una ma�ana de abril cuando mi hermana me
pregunt� si su chico se pod�a quedar a dormir conmigo en mi pieza
durante el fin de semana, claro le dije, no hay problema, en verdad no
conoc�a muy bien a su novio, solo lo hab�a visto un par de veces, pero
me pareci� muy atractivo, �l es mayor que yo por 1 a�o, yo tengo 19.
Era de noche, y me encontraba escribiendo en mi escritorio cuando
golpean la puerta de mi pieza, esta abierto, dije, sin dejar de mirar lo
que estaba haciendo ya que estaba muy concentrado en ello, era Luis el
novio de mi hermana, que entra a mi pieza, hace mucho fr�o, me comento,
si le dije por eso prend� la estufa, y yo que me acabo de duchar, me di
vuelta y quede at�nito al encontr�rmelo completamente desnudo sec�ndose
con una toalla, vaya!!, Comente, �l d�ndose vuelta y al ver que me hab�a
sonrojado se tapo inmediatamente, disculpa me dijo, es que tengo la
costumbre de secarme en la pieza, y no te da verg�enza le pregunte, no
me dijo, bueno fui criado entre puros hermanos, era com�n que nos
vi�ramos desnudos, ya veo le dije, pero s�guete secando no tengo
problema en que lo hagas, y comenz� a terminar de secarse, tenia un
cuerpo que a cualquiera le llamar�a la atenci�n, por su f�sico se le
notaba que le gustaba hacer ejercicio, tenia un f�sico incre�ble, vaya
suerte tiene mi hermana pensaba, el era de espalda ancha, piel
bronceada, gruesas piernas y fuertes brazos, tenia un trasero super bien
formado, y su verga era de tama�o normal pero bastante gruesa, vaya
parec�a toda una escultura, y estaba ante m� completamente desnudo, al
darme cuenta de la excitaci�n y la erecci�n que me produc�a, me voltee
r�pidamente para seguir con lo que estaba haciendo, pero no pod�a
concentrarme, no teniendo aquella tentaci�n dentro de mi cuarto, tengo
que admitir que me sent�a bastante mal mas que nada era el novio de mi
hermana, as� que me decid� a no tratar de hacer nada.
Llego la noche, apagamos la luz dejamos solo prendida la lampara de
velador y nos acostamos, nos pusimos a conversar durante largo rato
hablamos de todo, de familia, de pel�culas y terminamos hablando de
sexo, para ese entonces ya hab�a confianza entre los dos como si nos
conoci�ramos de toda la vida, al final aquella conversaci�n nos termino
calentando a los dos, te molestar�a que me corriera una, me pregunto, ya
no puedo aguantar, me quede mir�ndolo como tonto sin saber que
responderle, te molestar�a, pregunto nuevamente, no le dije si quieres
haslo le respond� ri�ndome, por lo nervios, nunca nadie me hab�a
preguntado algo as�, pero para mi mayor sorpresa, se levanto de la cama
y luego de sacarse la ropa comenz� a acariciarse acostado sobre la
cama, era realmente un espect�culo no pude aguantar mas de la excitaci�n
y comenc� a hacer yo tambi�n lo mismo, al ver como se masturbaba se me
llenaba de agua la boca no pudiendo aguantar mas le pregunte si lo pod�a
ayudar bueno ser� todo un placer, me respondi� me levante y me sent�
junto a el, tome su h�meda verga entre mis manos y comenc� a masturbarlo
cada ves con mas rapidez, �l gem�a de placer, cosa que me excitaba mas
aun, voy a acabar me dijo y met� toda su verga en mi boca, no me quer�a
perder por nada del mundo aquel fluido blanco y tibio que saldr�a por su
miembro, comenc� a tragarme todo su semen estaba calientito y sabroso,
se lo segu� chupando por largo rato mas, el me miraba y me acariciaba la
cabeza, luego me tomo y me puso boca abajo sobre la cama, unto sus dedos
con una crema que tenia en el velador y comenz� a meterme dedo por dedo,
masturbando mi ano, eso me causo un gran placer, luego de haberme
dilatado lo suficiente, me puso en cuatro abri� mis piernas y comenz� a
penetrarme r�pida y firmemente, parece que era todo un experto en cuanto
a sexo anal, cada vez me follaba con mas fuerza, yo ya no pod�a aguantar
los gritos que aquello me provocaba, por suerte mi pieza queda apartada
de la casa as� que nadie escucho nada, en medio de ese fogoso momento,
el se acuesta al lado m�o y me sienta sobre ese miembro erecto, lo tenia
muy duro, me lo meto por completo y comienzo a galopar sobre aquel trozo
de carne duro y caliente que me part�a cada vez con mas fuerza, creo que
nunca voy a olvidar la cara que tenia, en ella se reflejaba todo lo que
el sent�a, luego de estar sobre el termino dentro de m�, sent�a que me
llenaba por completo con su tibio esperma, cuando termino me levante y
se lo comenc� a chupar como muestra de agradecimiento por todo el placer
que me hab�a hecho sentir, el tomo mi verga y la comenz� a masturbar
hasta que acabe sobre su pecho, que termine limpiando con mi lengua.
Con el tiempo Luis y mi hermana se casaron, pero eso no impide que de
vez en cuando nos juntemos para disfrutar un grato y c�lido momento
juntos.