Hola mi nombre es Gonzalo Cruz Calder�n, soy un hombre
bisexual activo, estoy casado desde hace ya varios a�os con
una mujer que nunca supo satisfacerme en nada y peor ahora que
ya esta vieja y gorda, lo �nico que le agradezco son mis tres
hijos a los cuales quiero mucho.
Gracias a la vida que me dio la oportunidad de ser bisexual y
poder disfrutar de mas opciones amorosas y as� poder llegar a
relacionarme con un chico que es treinta a�os menor que yo, y
que me devolvi� esa pasi�n, ese deseo, esa lujuria que mi
esposa me hab�a hecho perder. El nombre de ese chico es Jose y
es nada mas y nada menos que �el sobrino de mi esposa!!!
Yo soy jefe del departamento de geof�sica de la Universidad
Nacional, y fue ah� en donde comenz� todo entre Jose y el
relator de esta historia, y fue mi esposa quien nos uni�, ya
que ella fue la que me pidi� que le consiguiera trabajo en la
universidad.
Desde las primeras semanas que Jose empez� a trabajar conmigo
se portaba muy atento, me regalaba caramelos, estaba pendiente
del cafecito que siempre tomo a las tres de la tarde y me lo
servia justo en mi escritorio, pero lo que m�s me gust� fue
que al ver que yo almorzaba cualquier cosa que pod�a comprar
cerca, dispuso un dia llevarme comidita casera, tal como me
gusta, y a partir de ese dia nuestra relaci�n fue mas cercana,
me d� cuenta que yo le atra�a a Jose, y eso, confesar� que al
principio me puso un poco nervioso ya que ese chico era mi
sobrino pol�tico, pero con el paso de los meses ese
nerviosismo se convirti� en deseo.
Cuando cumpl� mis 51 a�os Jose se encarg� de organizar una
peque�a reuni�n en la oficina, que comenz� despu�s de las
horas laborables, me llevo un regalo, pastel, boquitas, licor,
cerveza y un tr�o de mariachis. Al terminar la reuni�n a eso
de las 9 de la noche, solo nos quedamos Jose y yo, fue en ese
momento que me pidi� que abriera el regalo que me hab�a
llevado, era una camisa de seda, mis favoritas, que despu�s de
agradecerle por todo me pidi� que me la probara, me quito el
saco, luego la corbata y seguidamente la camisa bot�n por
bot�n, luego comenz� a besarme todo mi pecho, me mord�a los
pezones duros por la excitaci�n, no me pude contener mas, me
baje la bragueta de mi pantal�n y tomando con fuerza a Jose
por la cabeza lo agache e hice que me chupara por un largo
rato mi pija, lo cual hizo de maravilla. Despu�s se desvisti�
dejando su tierna piel blanca descubierta, lo sub� a mi
escritorio, se acost� con las piernas levantadas y separadas,
las cuales coloqu� sobre mis hombros y poco a poco le fui
introduciendo mi pija por su rico culo el cual conoci� su
verdadero due�o esa noche. Cuando estaba a punto de terminar,
Jose me pidi� que le metiera mi pija en su boca, y yo con
gusto lo hice para poder hacer que tomara de mi semen, del
cual no dejo ni una gota.
A partir de esa noche mi vida ha cambiado, la lujuria es parte
fundamental de mi vida, me fascina cogerme a Jose en donde sea
y como sea, hasta me he atrevido a hacerlo en mi propia casa,
asi es, y ah� les va el relato.
Sucedi� un fin de semana en el cual mi esposa se fue a ver a
su madre quien vive fuera de la ciudad, y se llevo a mis
hijos; pasar�an s�bado y domingo ausentes, por tal raz�n
aprovechando que la casa estaba sola, lleve a Jose para pasar
el fin de semana juntos, disfrutando de las buen�simas
chupadas de berga que me hizo en varias partes de mi casa, y
que decir de las cogidas, excelentes, sobre todo las que le
hice a Jose en la misma cama en la que duermo con mi esposa,
eso estuvo de total lujuria, sobre todo cuando Jose gritaba
�T�a, tu marido me esta cogiendo en tu propia cama�.
El domingo me encanto verlo desnudo, solo usando una de mis
camisas mientras me preparaba el desayuno, eso me �xito
much�simo, no aguante, y de nuevo le revente el culo sobre el
desayunador. El fin de semana culmin� con una riqu�sima mamada
de pija que me di� Jose en el carro mientras lo llevaba a su
casa.
Despu�s de eso ya ha pasado el tiempo y cada vez son mejores
nuestros encuentros sexuales, estoy pensando seriamente en
separarme de mi esposa para irme a vivir con Jose, y as� poder
estar juntos siempre.