En cierta oportunidad, luego de una celebración en casa de
un amigo, me dirigí a uno de esos lugares populares donde venden comida a altas
horas de la noche. Ahí encontre al hermano de Manuel, un compañero de trabajo.
Su nombre es Ivan. Cuando me disponia a comer el aparecio, totalmente borracho y
en compañia de otras dos personas. Luego de charlar un momento me dijo si
podiamos continuar el encuentro en mi casa y que el se encargaria de comprar
algunas bebidas que amenizarian la velada. Acepte y nos dirigimos a mi
departamento (yo vivo solo). Ahi estuvimos tocando algunas canciones en la
guitarra, charlando de vanalidades, discutiendo sobre futbol y religion. Los dos
mas entusiastas eramos, sin duda, Ivan y yo, pues en medio de la charla nuestros
dos acompañantes quedaron dormidos en los sofas del living. Fue entonces cuando
decidi cubrirlos con unas cobijas que fui a sacar a mi habitacion. Ivan me
siguio y, mientras estabamos en mi cuarto, me dijo que el pantalon que yo usaba
ese dia era el que el estaba buscando desde hace tiempo en todos los centros
comerciales. Luego de preguntarme cuanto costaba me dijo "puedo probarmelo?", a
lo que yo respondi que si. Me quite los pantalones y el hizo lo mismo. El se los
puso mientras yo observaba en calzoncillos. La idea de que el usara mi ropa me
comenzo a exitar y el noto que mi verga se paraba sin que yo pudiera evitarlo.
Se quito los pantalones y se acerco lentamente. "Sabia que te gustaba", me dijo.
"Tu me encantas y no sabia como decirtelo". Dio un paso mas y tomo mi nuca
acercando mi cara a la suya. Me beso y se arrimo a mi haciendo que nuestros
penes, apenas separados por los calzoncillos y parados como mastiles, se
juntaran. Senti el calor de sus genitales que me provoco una de las mayores
excitaciones de mi vida. Tan excitado estaba que, sin querer, comence a moverme
de atras a adelante, casi por instinto. Me saco la camisa poco a poco y apago la
luz. De no saber que decir solo atine a exclamar: "hace un poco de frio!". El me
abrazo y me empujo lentamente sobre la cama a tiempo de hacer a un lado las
cobijas. Termino de desnudarme y yo, para no sentirme como el lado femenino de
la pareja, hice lo mismo. En la cama comenzamos a besarnos. El me acariciaba el
pene de una manera que nadie lo habia hecho antes. Nuestros cuerpos comenzaron a
traspirar y nuestros alientos se juntaban en excitantes jadeos apasionados. Yo
le agarraba las nalgas separandoselas mientras le abrazaba. El continuaba con su
interminable preambulo que logro que yo tomara la iniciativa. Lo puse en
posicion de gateo y comence a cogerlo. Nuestros testiculos chocaban mientras yo
lo penetraba con fuerza. El, al parecer, ya tenia el culo bien entrenado, pues
no mostro ningun sintoma de dolor. Antes de correrme quise que el tambien me
culeara. Asi lo hizo; pero mas suavemente. Cuando senti que el iba a terminar
tome su verga y comence a chuparla. El rio y me dijo que no sabia de lo que me
perdia, que lo mejor era que te inundaran el culo. Yo, sin acer caso, continue
la mamada hasta que se corrio en mi boca. Despues el tomo mi polla y empezo a
masturbarme, se la llevo a la boca por un minuto y luego se la enterro y comenzo
a moverse como una fiera, largando algunos gemidos que, supongo, nos delataron
ante los amigos que estaban en la sala. Sin embargo eso no nos importo.
Continuamos tirando deliciosamente hasta que termine dentro de el soltando un
litro de semen, que rebalzaba y llegaba hasta sus piernas. Eso me provoco lamer
mi propia leche y, mientras lo hacia, el se corrio de nuevo en mi cara. Tome su
calzoncillo y me limpie con el. Los dos, luego de tanta agitacion, acabamos
muertos en la cama y, luego de algunos minutos, recordamos la presencia de los
otros dos muchachos. Nos vestimos rapidamente y yo me dirigi a la sala. Ninguno
de nuestros compañeros de juerga se encontraba ahi. Supuse que se fueron
discretamente al escuchar nuestro alboroto. Me dirigi al baño y ahi los
encontre, uno de ellos con las manos sobre el inodoro, con los pantalones a la
altura de los tobillos y, el otro, cogiendolo con una singular cara de
embriaguez y satisfaccion. Al verme ahi, uno de ellos dijo "Ya terminaron?", a
lo que yo conteste que si, asumiendo discrecion mutua. Entonces ambos salieron y
se fueron a mi cuarto, ante el asombro de Ivan que salia de ahi. Ivan se rio y
volvio a acercarse a mi evitando que yo saliera del baño. Nos duchamos y
volvimos a coger. Despues, cuando salimos, nos dirigimos a mi habitacion y
cogimos entre los cuatro. La borrachera ya se nos habia pasado. Asi seguimos
hasta el amanecer. Luego cada uno tomo sus cosas y se fueron juntos. Yo me quede
en cama hasta el medio dia, hora en que me di cuenta que... FALTABA MI
PANTALON!.