Pasi�n en Cochabamba
Un d�a muy temprano hace dos a�os atr�s, en una ciudad muy bonita como es
Cochabamba �l estaba ah� sentado en una plaza peque�a, entre pocas luces y
entre poca gente.
Nos vimos y nos gustamos, empez� como una relaci�n normal, como cualquiera. �l
tenia 27 a�os y yo 16. A m� no me importaba la edad y a �l tampoco.
As� seguimos nuestra relaci�n durante un a�o de amor, sexo, pasi�n y
constantes salidas a lugares bellos paisajes hermosos (si bien yo no supe
antes lo que era tener una pareja estable y con futuro ahora lo se); pero lo
s� tarde, porque esa persona ya no pertenece a mi vida. Siguieron pasando los
a�os; casi llegamos al segundo cuando conoc� a otro chico que no era mi
pareja. Era algo incre�ble: m�s lindo, m�s fuerte y quiz�s hasta m�s vigoroso
al momento de hacer el amor. Era un cubano de 26 a�os, muy lindo. Fui infiel
y, a pesar de todo, a pesar de los momento que yo pasaba con este cubano, mi
coraz�n y mi mente segu�an con mi pareja hasta que �l, un d�a, encontr� a otra
persona m�s joven que yo. Y seguramente se enamor� (o solamente qued�
alucinado, como yo).
En una ciudad fr�a como La Paz, donde la neblina baja y te enfr�a desde los
pies hasta la cabeza, cierta noche me confes� que hab�a conocido a esta
persona y, la verdad, me doli� mucho porque �l no solamente estaba alucinado
si no que tambi�n, al parecer, estaba enamorado.
Y fue ah� cuando me convert� el ser que ahora soy, en un ser con mucha pasi�n
y mucho amor para dar. Pareciera ser que el amor y la pasi�n son mi c�rcel, mi
martirio. No por ser dos cosas que no pueda compartir con cualquier otra
persona, sino por ser los m�s profundos sentimientos que hoy no puedo expresar
a la �nica persona que me interesa y que realmente amo .
Ahora estoy lejos, escap� a un pa�s lejano. Pas� casi un a�o y medio desde que
lo vi por �ltima vez y, a�n hoy, sigo teniendo en mi mente las noches de amor
y pasi�n que pas� junto a �l.
Tantas an�cdotas que contar, tantas risas y tantas l�grimas de felicidad que
pase a su lado... Y, ahora, solo me queda pensar que, alg�n d�a, podr� ser
feliz nuevamente, no s� si con �l o con otra persona. Solo s� que estoy
enamorado de alguien que no me pertenece.
Esta historia es parte de mi vida. Una vida en la que el amor esclaviza a uno.
Una vida donde cada d�a, cada noche, son una eternidad porque en el d�a te veo
entre la gente y por la noches te sue�o.
Amor m�o, solo piensa que en este mundo donde las cosas pasan por alguna
raz�n, hay alguien que t� conoces, que te ama y solo ve el momento y el d�a en
que vuelva a verte.
[ LISTA DE RELATOS ]