Paideia

Pocas palabras tan valiosas e importantes ... y tan olvidadas.

Es curioso que �sta palabra resulta m�s querida para una persona homosexual y resulta parad�jico que sean hoy los que menos la usan y, lo que es peor, los que menos la aplican. Pero: �Saben acaso hoy lo que significa?

La referencia m�nima y obligada la encontramos en el texto de Werner Jaeger, am�n de los textos griegos que fueron producidos entre el siglo VIII y el V a.c.  Antes de aclarar la idea, se�alar� las palabras que hemos de tomar en cuenta:   KOINE, PAIDEIA, ARETE.

Toda cultura se mantiene gracias a una tradici�n que le permite reflejar un lenguaje com�n al que tal comunidad aspire. A ese lenguaje com�n, ya los griegos le llamaban KOINE: Una alta forma de expresi�n cultural a la  que un pueblo podr�a aspirar.

Este lenguaje al ser expresado, refleja unos valores espec�ficos. De ah� que no hay duda alguna en hablar de Cultura Homosexual puesto que a ella y solamente a ella le corresponden determinados valores espec�ficos a los que responden sus integrantes. Los dem�s que se acerquen a ellos, aunque sea con buena voluntad, jam�s podr�n capturarlos enteramente, puesto que no les pertenecen. Y tales valores determinan una cierta sensibilidad: no todos desarrollamos la misma.

Honestidad, fidelidad, respeto, amor, amistad y hero�smo, son algunos de esos valores que fundamentaron a la cultura griega cl�sica y que les fueron heredados a los homosexuales de �pocas posteriores, aunque hoy los gobiernos dilapidan enormes sumas de dinero para que los individuos aprendan lo contrario, en especial la traici�n y la vigilancia [recuerda el proyecto ECHELON]. Tales valores los encontramos en la literatura de la �poca y reflejados en arquitectura y cer�mica especialmente hasta el siglo -V, momento a partir del cual la situaci�n pol�tica de Grecia cambia a partir de la guerra del Peloponeso.  Tan s�lo la combinaci�n de estos valores en tanto eran asimilados por el individuo le permitian alcanzar un grado de nobleza en sus acciones que lo llevaban a ser el mejor, a ser virtuoso, cualidad que le confer�a a su persona la tan buscada ARETE, misma que lo ubicaba en un nivel ARISTOCRATICO, es decir en un nivel de lo mejor, pues aristocr�tico significa solamente eso: el mejor. Y el homosexual necesita caminar sencillamente hacia esa idea, a la de ser un homosexual aristocr�tico, un homosexual mejor y arete�co, es decir, noble en su alma y sus acciones.

Un homosexual que logra comprehender tales valores a partir de una aret�, lo dejan como una persona aristocr�tica y a partir de esta nobleza que NO es pragm�tica, tal homosexual puede expresarse mediante la koin� que le es propia a fin de alcanzar el equilibrio entre su mente y su f�sico.  Las obras de S�crates las conocemos por medio de su alumno Plat�n y todas giran alrededor de esta idea: el hombre aristocr�tico.

Si logramos ubicar nuestra vida a partir de una aret�, establecemos una ontolog�a aristocr�tica que se expresa mediante una koin�, en este caso espec�ficamente homosexual. Y al consolidar estos aspectos en nuestra persona, alcanzamos un nivel superior al que los griegos le denominaron paideia y que representaba un alto concepto de valor y de ideal consciente, a la vez que una gran fuerza educadora que parte de la nobleza y de la aret�.

Nos dice Jaeger: "Signific� la educaci�n del hombre de acuerdo con la verdadera forma humana, con su aut�ntico ser." [p.12]  Tal es, era y ha sido, la paideia.

Ahora vemos como, si queremos educarnos acordes a nuestro SER, debemos de educarnos bajo principios de paideia. Y de eso, ya los griegos cl�sicos nos dejaron bastantes herramientas. Decimos que los homosexuales conformamos una "comunidad", y agrega Jaeger: "La superior fuerza del esp�ritu griego depende de su profunda ra�z en la vida de la comunidad" [p.13]... aunque la comunidad homosexual se encuentre dispersa y solamente responda a intereses pragm�ticos como, por ejemplo, la obsesi�n por la belleza f�sica.

La homosexualidad es una forma de vida y por ser tal, manifiesta una forma de pensar y de actuar. De ellas se desprende una cultura y esa cultura refleja y sustenta valores positivos que generan una profunda fuerza educadora. Tal es la piadeia que ya desde tiempos de Homero ha quedado fijada en los textos.

La paideia permanece y subsiste a pesar de los simples y b�rbaros otros, sean cu�les sean. Est� ah� para que la tomes y te penetre con su profunda fuerza educadora. Reflexiona a partir de las lecturas fragmentadas que a lo largo de todo el proyecto de TECNE te ir� presentando y, si lograras desarrollarlas completas por tu cuenta, tu trabajo habr� rendido fruto.